La Industria Venezolana
Endógena del Papel (INVEPAL) incrementó en 244% la producción de
este año con respecto al 2011, a fin de consolidar un nuevo modelo
socio productivo, aseveró el vicepresidente del Área Económica
Productiva y ministro del Poder Popular de Industrias, Ricardo
Menéndez.
Este
miércoles, durante una visita a Cuadernos Invepal, ubicado en
Maracay, estado Aragua, explicó que se logró aumentar de 3 mil
toneladas de papel procesado en el año 2011 a 9 mil toneladas este
año.
Detalló
que la producción de resmilla pasó de 1.183 toneladas (2011) a
3.900 en 2012; el papel para bolsa de 152 toneladas (2011) a 1.100
toneladas; cuadernos de 1.188 toneladas a 2.100 toneladas; y
recubiertos de 490 (2011) toneladas a 2.500 toneladas este año.
El
ministro ratificó que luego de la adquisición de Invepal por parte
del Gobierno Bolivariano en 2005, la industria inició un proceso de
recuperación y reivindicaciones laborales.
“Invepal
es una demostración clara de la diferencia entre dos modelos: el
modelo neoliberal, sin ninguna clase de compromiso con los
trabajadores ni con la producción interna en Venezuela; el otro
modelo enfocado al compromiso y la visión de responsabilidad del
comandante Chávez con los trabajadores y el aparato productivo
nacional (...) Esta planta fue llevada prácticamente a la quiebra
por quienes fueron sus antiguos dueños, dejaron en abandono a los
trabajadores y a diferencia de eso, el Estado revolucionario planteó
la recuperación de la planta, al mismo tiempo se hizo justicia con
la masa trabajadora”, enfatizó.
Asimismo,
el presidente de
Invepal, Francisco Espinoza, destacó
que este
año se han distribuido
más de de 10 millones
de cuadernos.
Reivindicaciones
Laborales
En
la
actualidad, el trabajador desempeña un rol protagónico y ejerce
la contraloría social proponiendo la realización de asambleas y
reuniones para discutir las fortalezas y debilidades de la empresa,
sostuvo Espinoza.
Silvia
Gómez,
trabajadora de Invepal, resaltó que a diferencia de la
cuarta república donde se explotaba al empleado, el Gobierno
Bolivariano garantizó una serie de beneficios a los trabajadores de
esta industria como el acceso a la educación y a la salud.
“Dentro
de
la empresa tenemos una universidad, misiones sociales, en fin
muchos beneficios que antes no teníamos. Estoy feliz de trabajar en
revolución”, expresó Gómez.
Jaqueline
Gutierrez,
trabajadora de Invepal, destacó que desde la empresa esta
en manos del Gobierno venezolano ha contribuido a mejorar la calidad
de vida de las comunidades a aledañas a la industria.
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