Caracas, 22 de noviembre de 2011..- Un total de 600 indemnizaciones se realizaron en sectores de Petare para llevar a cabo las obras del Cabletren Bolivariano, medio de transporte que transformará a la localidad, según aseguran sus habitantes, en especial aquellos que cedieron sus espacios para la construcción.
Cuando comenzaron los procesos de expropiación para la construcción del nuevo sistema de transporte, muchos vecinos sintieron temor de ceder sus viviendas, pues en gobiernos anteriores eran atropellados e indemnizados con pagos bajos.
Pero ese temor que reinaba en la comunidad desapareció cuando hombres y mujeres trabajadores del Metro de Caracas llegaron a Petare, dispuestos a escuchar las necesidades de sus habitantes y sobre todo a negociar en una relación ganar – ganar los espacios que se necesitaban para la construcción del Cabletren Bolivariano de Petare.
Fue un proceso de arduo trabajo, que trajo como resultado que los indemnizados se sientan satisfechos porque han hecho una contribución de incalculable valor, para materializar la construcción de este medio de transporte que beneficiará a miles de petareños.
“Nosotros como comunidad debemos contribuir con las obras que se hacen en socialismo. Hoy estoy satisfecho de ceder mi vivienda para que se pueda ejecutar una obra tan novedosa que beneficiará a miles de personas”, así lo dijo Luís García, quien por más de 25 años tenía su vivienda en el barrio El Esfuerzo.
“Aquí todos ganamos, pues las personas que fuimos expropiadas y sus inquilinos, estuvimos de acuerdo con las indemnizaciones que nos fueron pagadas”, explicó García.
Asimismo, Haida Castro quien tenía un comercio en el mercado La Cuchilla por más de 30 años, manifestó que “me dolió mucho entregar mi local, pero cuando reflexioné me di cuenta que esto es un beneficio para la gente de mi parroquia. Como vecina y revolucionaria debía contribuir con la construcción de este Cabletren”.
“El día de mañana cuando vea funcionando este medio de transporte, diré con orgullo que yo ayudé para que esta obra fuese una realidad”, dijo notablemente emocionada Castro.
Por su parte, Claudio Sánchez, transportista del terminal Miranda, explicó que “el Cabletren llegó a Petare para ayudarnos a todos, nuestro terminal fue reubicado en un espacio mejor y con mayor seguridad”.
“En otros gobiernos nos hubiesen sacado de estos espacios sin importar nada, pero gracias a éste, a Chávez, no tuvimos miedo de ceder nuestros espacios y ser reubicados”, indicó Sánchez.
Todos los vecinos, comerciantes y transportistas que fueron indemnizados coinciden en que el temor que en un primer momento sintieron desapareció para convertirse en alegría, progreso y bienestar. La comunidad de Petare cada día se levanta y observa como se construye un medio de transporte que traerá mayor calidad de vida a todos y todas.
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