Esta investigación contribuirá al fortalecimiento
de la seguridad ciudadana, mediante la detección de los espacios reales y
potenciales generadores de violencia en la vida cotidiana de la Gran Valencia:
comunidades, transporte público, liceos, espacios recreativos
Un grupo de investigadores de la Universidad de Carabobo (UC) trabaja en la creación de un laboratorio sobre la violencia de la vida cotidiana en la Gran Valencia, con el fin de promover el Buen Vivir en las comunidades, y fortalecer la seguridad, la justicia y paz.
Con la aplicación de este proyecto pretenden
aportar un conjunto de propuestas teórico-prácticas para asumir y atacar el
problema de la violencia. "Es un asunto de violencia crónica de toda una
sociedad y del resquebrajamiento de su tejido social. Por lo tanto, el objetivo
es la paz; es decir: las paces, su promoción, su fomento, organización de
actores, y programas de intervención en los diferentes espacios. La paz es lo
único que puede proporcionar aspectos reales para generar una ciudad segura,
una escuela segura, un transporte seguro, incluyendo unas iglesias comunales
sin discriminación", apuntó Freddy Bello, profesor de la Universidad de
Carabobo, y responsable del proyecto.
La idea es crear el Observatorio sobre la Violencia
de la Vida Cotidiana en la Gran Valencia, estado Carabobo, a fin de identificar
mediante la construcción de indicadores cualitativos y cuantitativos, cuáles
son espacios generadores de violencia, para establecer bases y sistemas de
información que contribuyan a la promoción del Buen Vivir —en una sociedad donde la burguesía ha creado y crea unas necesidades
individuales ilimitadas, que generan frustración, en la mayoría de la gente,
por no poder satisfacerlas todas: un hiperconsumismo que fomenta la violencia.
“Este observatorio es uno de los
primeros en el país, si no el primero que hay, sobre el estudio de los espacios
de la vida cotidiana como promotores de la cultura de la violencia y, por ende,
de modos de relaciones y formas de vida. Los otros observatorios que existen
sobre violencia se limitan a vincular este fenómeno social con la inseguridad”,
puntualizó el investigador.
Freddy
Bello y el grupo de investigadores se han planteado
organizar la información sobre los diferentes tipos de violencia, tomando en
cuenta escenarios como comunidades empobrecidas culturalmente (carencia de
capacidad de control y sanción social comunitaria), el transporte público
(camioneticas, busetas y autobuses), centros comerciales y otros ambientes
comerciales y recreacionales (públicos y privados), espacios urbanos y periurbanos
de la ciudad que han cambiado transitoriamente de funciones, ámbitos educativos
reconocidos por las acciones “vandálicas”.
"La
vida en estos espacios, sin duda, brindará información para conformar un
Observatorio sobre la Violencia en la Vida Cotidiana. Igualmente, el diseño de
un sistema de monitoreo sobre la dinámica de los espacios donde se desarrollan
los acontecimientos de violencia", reiteró Bello.
Otro de
los retos es consolidar un espacio interdisciplinario para la investigación y
formación de talento humano, con el propósito de generar políticas sobre el
tratamiento del problema de la violencia, y "crear teorías para explicar,
comprender y estudiar el fenómeno de la violencia y, así, difundir políticas de
Estado para prevenirla, atenderla y atacarla", aseveró Bello.
Prevenir
la violencia para generar paz en las comunidades
Este
proyecto permitirá a usuarios de los diferentes ámbitos o escenarios de
violencia y a los organismos encargados del desarrollo social, atención y
seguridad ciudadana, generar programas y proyectos factibles como la
transformación de los departamentos de orientación en los liceos públicos, en departamentos
de detección para el tratamiento de la violencia escolar como un problema de salud
educativa.
Por otra
parte, se proponen organizar talleres y formar colectivos "Jóvenes
constructores de paz y vida"; escuelas musicales (sistemas de orquestas),
involucrar a las empresas de propiedad social, a las damas de prevención y
atención a la violencia escolar, y a los cuerpos de policía.
La
construcción de indicadores y la tipificación de comunidades y espacios
"ayudará a comprender la violencia como hecho social complejo, de orden
socioantropológico, cultural y jurídico-social; y a generar programas de
prevención para el tratamiento y atención de este fenómeno en la
población".
Vale
decir que, este proyecto de investigación se suma a la lista de estudios
financiados a través de los recursos provenientes de la Ley Orgánica de
Ciencia, Tecnología e Innovación (Locti), la cual impulsa iniciativas que vayan
en función de fortalecer el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e
Innovación, así como la Gran Misión A Toda Vida Venezuela.
"Sin
duda, la ejecución de los recursos Locti es oportuna ya que está dirigida a
estudiar y plantear soluciones a problemáticas reales y manifestadas por las
mismas comunidades. Además, promueve el intercambio de conocimientos y la
interrelación de los pares a nivel nacional, a través de sus aportes e
investigaciones", enfatizó.
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